A lo largo de este blog, hemos visto distintas cuestiones sobre la meditación y el mindfulness, particularmente, lo que estas dos pueden hacer por nosotros. En esta ocasión, quisiera hablar más a fondo de los elementos de nuestra vida diaria que pueden influir en la calidad de meditación que tengamos.
Por ello, les dejo mi lista de 5 elementos que son importantes al momento de meditar:
Estar al pendiente de tus sentidos:
¿A qué me refiero con esto? Me refiero simplemente a que no los olvides en un cajón cuando empieces a meditar: trata de encontrarte en un lugar que te sea agradable para la vista, para el tacto, prende algún incienso o utiliza aceites aromáticos para estimular tu olfato, ¡yo qué sé! Lo que a ti te haga feliz y te ayude a crear una dinámica más regular de meditación. Si nos gusta el entorno y lo que nos rodea durante la meditación, será más fácil no olvidarla, ¿cierto?
La comodidad:
Este es un aspecto poco valorado, a mi parecer. Sobre todo cuando estás empezando a meditar, es muy fácil que tu mente divague si no se siente cómoda, si intentaste meditar sentado pero en realidad te duele la espalda, o si en realidad querías mantenerte alerta y te quedaste dormido; tiene que ser un punto medio de comodidad: que no sea demasiado cómodo que te quedes dormido y que no sea muy poco acogedor que entonces no puedas concentrarte. Tienes que crear un espacio por dentro y por fuera que se acomode a quién eres.
Tu postura:
En el blog ya hemos hablado sobre algunas de las posturas que puedes adoptar para meditar y, en esa ocasión hablamos sobre lo importante que es tener en mente la postura del cuerpo. Esto va de la mano con la comodidad, con la concentración y con nuestra atención.
La respiración:
En entradas de yoga hablamos del pranayama y del prana, pero para la meditación es igual de importancia la frecuencia y el ritmo que llevemos con nuestra respiración. Esta marcará la pauta para nuestra meditación y la forma en la que estemos entrando a ella. Para principiantes, recomiendo que inicien respirando por la nariz y exhalando por la nariz, incluso le podemos poner un número antes de cada inhalación o al término de cada exhalación y contar diez respiraciones.
La atención:
¿Recuerdan el ejercicio dicho en la respiración sobre contar hasta diez respiraciones y luego repetir? Bueno, este es un ejercicio vital para la atención ya que, cuando menos nos damos cuenta, ya estamos muchos números más adelante. La atención, en este sentido es increíblemente necesaria para la meditación: nos ayuda a estar atentos, sin seguir pensamientos y en plena observación de lo que sucede en nuestra mente sobre el proceso.
Espero les haya gustado esta pequeña lista y que estén disfrutando de meditar, particularmente en estos momentos que suelen ser complicados. Recuerden que con el simple hecho de asistir al llamado de la meditación, ya llevamos la mitad del camino andado.
Seamos receptivos. Namasté.