Les traigo una gran noticia desde la semana pasada: ¡cumplimos un año de practicar yoga juntos online y grabado!
No tienen idea el grado de felicidad que esta noticia trajo a mi vida; no sólo por ser un hito en Acacia, cuando trascendió la palabra escrita del blog para llevarlo a tu pantalla, sino porque me permitió conocer a mucha gente y poder compartir mi pasión por la práctica del yoga y llevártela a la comodidad de tu hogar.
En este año me han preguntado varias veces: ¿Puedo yo también practicar yoga? Y me han puesto muchas situaciones de por medio: el peso, la edad, el género, las ocupaciones, ¡en fin! Miles de razones por las cuales no acercarse al tapete y, a todas de ellas, he respondido que lo intenten porque en verdad el yoga no es tan elitista como las redes sociales a veces nos lo quieren hacer ver.
Para mí es un gusto decir que en un año hemos logrado avanzar y recibir a personas de todos los niveles de práctica y con distintos objetivos en mente sobre lo que quieren lograr, lo cual – sobra decir – es más que válido. Algunos buscan relajarse y librarse de alguna dolencia, por lo general relacionada con la ansiedad y con el estrés, o, bien, otros buscan dar movimiento a su cuerpo y mantener un estado de salud óptimo; otros, también, buscan un movimiento que vaya de la mano con algún camino espiritual que estén siguiendo. Todos nos hemos encontrado en una comunidad que, diario, se ha encontrado en línea para practicar Dharma, Ashtanga y Yin y hemos compartido cómo nos sentimos.
Nunca pensé que pudiera compartir de una manera tan bonita lo que me apasiona y lo que amo con otros y que pudiera transmitir el conocimiento que mis maestros me han dado hacia una comunidad. El sentimiento de expansión es fantástico, no sólo porque la comunidad Acacia ha crecido, sino por el sentirme realizada a nivel personal por el trabajo que hago con mis alumnos y lo que ellos me enseñan todos los días.
A la comunidad Acacia:
Gracias por ser siempre tan únicos, tan auténticos y echarle tantas ganas a su práctica. Para mi ha sido un lujo ver cómo van creciendo y se conectan con otros. Este año, definitivamente, no hubiera sido lo mismo sin ustedes.
Y a ti que estás leyendo esto y que todavía no das ese paso hacia adelante:
¿Qué estás esperando para probar una clase de yoga con Acacia? Recuerda que la primera clase es gratis y que el yoga es para todos. No te pierdas de los muchos beneficios que puede traer a tu vida.
Seamos receptivos. Namasté.
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