Una de las posturas más importantes que aparecen al final de las series de Dharma Yoga es Ardha Matsyendrasana o la Postura de la Media Torsión. En lo particular, a mí me gusta mucho hablar de ella y practicarla ya que es de las que tienen efectos más notorios sobre nuestro cuerpo y nuestro bienestar.
Ardha Matsyendrasana es una media torsión con la espalda; es una postura básica-intermedia que permite que la columna tenga movilidad lateral y que brinda un gran ejercicio al sistema digestivo.
¿Por qué se llama Ardha Matsyendrasana?
Su nombre lo lleva por el sabio Matsyendra y Ardha quiere decir “medio”. En una traducción mucho más literal sobre lo que estás haciendo en la postura, la llamamos la Postura de la Media Torsión o Media Torsión Sentada.
¿Cómo entramos a Ardha Matsyendrasana?
Primero vas a empezar sobre tu tapete, sentado y con las piernas estiradas al frente en Dandasana. Después vas a doblar tu pierna derecha por encima de la izquierda, apoyando el exterior del pie derecho por fuera de tu muslo izquierdo, tocándolo con el talón: el talón, tu rodilla y tu columna tienes que estar alineados en esta postura.
Después vas a estirar tu espalda, llevar la mano derecha hacia atrás y hacer la torsión hacia el lado derecho con tu mano izquierda, de forma que todo tu torso esté viendo hacia el costado derecho. Puedes hacer un mudra con tu mano izquierda, el codo está “atorado” contra tu rodilla derecha; sino quieres hacer esto, puedes llevar tu mano izquierda hacia tu muslo derecho para dar más fuerza a la torsión.
Una vez que termines debes de hacer la misma postura para el otro lado.
¿Qué beneficios tiene Ardha Matsyendrasana?
Además de ser una de las mejores posturas para el sistema digestivo, también brinda una gran flexibilidad a la columna vertebral, aliviando el lumbago y reduciendo la escoliosis de manera progresiva. De igual manera, nos va a ayudar a ser más flexibles en el área de la cadera, las rodillas, tobillos y hombros.
Ardha Matsyendrasana también estimula el hígado, los riñones y los pulmones, alivia el dolor menstrual, la fatiga y el dolor de espalda.
Aún cuando esta postura no se recomiende para el periodo del embarazo o si tenemos algún problema en la columna, les invito a leer sobre las historias de las posturas y analizar más a fondo porque hacemos algún tipo de flexión o movimiento. ¡Podemos encontrar cosas increíbles!
Seamos receptivos. Namasté.
Namasté 🙏🏻