Eka Pada Raja Kapotasana o postura de la Paloma Real sobre una pierna

Eka Pada Raja Kapotasana

Como hoy es mi cumpleaños, decidí hablar sobre una postura que a mí me trae una alegría inmensa a mi corazón. Desde el primer día que me di cuenta de que podía llevarla a cabo, sentí una emoción increíble y un sentimiento muy grande de satisfacción con mi práctica personal de yoga.

 

¿Qué quiere decir Eka Pada Raja Kapotasana?

 

Eka Pada Raja Kapotasana es una postura que proviene de las siguientes palabras en sánscrito:

Eka: Uno

Pada: Pierna

Raja: Real o Rey

Kapota: Paloma

Asana: Postura

 

¿De qué trata Eka Pada Raja Kapotasana?

 

Eka Pada Raja Kapotasana es una asana en la que sacamos el pecho y se lleva a cabo una fuerte extensión y apertura de la cadera. Es una postura avanzada pero que se puede ir trabajando poco a poco, incluso desde series más suaves como de Yin Yoga.

 

¿Cómo entramos a Eka Pada Raja Kapotasana?

 

En primer lugar, nos colocamos de rodillas sobre el tapete, con una de las piernas dobladas por delante del cuerpo, la otra pierna se estira hacia atrás. Posteriormente, la pierna de atrás se dobla y tomamos el pie con ambas manos, arqueando la espalda. Si eres muy flexible, puedes poner tu pie sobre tu cabeza. Como siempre, una vez que hayamos terminado con un lado, debemos practicar con el otro para ejercitar ambos lados del cuerpo por igual.

 

¿Qué hacer si eres principiante?

 

Para aquellos que aún no lleguen a la postura completa, existen varias vertientes, como lo son Salamba Kapotasana, en donde únicamente flexionas una pierna por delante y estiras la otra atrás con el empeine apoyado en el tapete, las manos puedes ir a los lados de la cadera para ayudarte con el equilibrio o, bien, en mudra de oración al centro del pecho.

 

Beneficios de Eka Pada Raja Kapotasana

 

Además de la apertura de cadera y flexibilidad, las cuales ya mencionamos anteriormente, Eka Pada Raja Kapotasana tiene varios beneficios para el practicante de yoga. Entre los más destacados se encuentra la reducción de estrés y ansiedad, apertura de pecho, mejora la oxigenación del cuerpo, mejora la activación de los músculos de la espalda, los muslos y el pecho.

 

Esta postura es de mucha técnica y de mucha paciencia pero, eso sí, tiene grandes resultados y una enorme satisfacción una vez que llegamos a ella. Es un punto de aprendizaje para el yogi, una especie de premio, al menos eso ha sido para mí.

 

Como siempre, les recomiendo que si van a intentar esta postura la hagan después de haber calentado el cuerpo y con la ayuda de un profesional para evitar lesiones. Sino, siempre está disponible empezar poco a poco para ver los resultados de nuestros esfuerzos y de la práctica.

 

Seamos receptivos. Namasté.

error: